El sábado 8 de noviembre, en el marco de La Noche de los Museos, Cassia House abrió sus puertas con una propuesta participativa que desdibujó los límites entre arte, público y proceso. Soy yo, somos nosotros, acción en vivo del artista Julián Rodríguez Vigo, transformó la galería en un espacio de creación colectiva, donde la imagen se volvió una excusa para pensar(nos) juntos.
Sobre una serie de siluetas humanas desplegadas en la sala, no como retratos cerrados, sino como memorias abiertas, el público fue invitado a intervenir, escribir, dibujar o simplemente observar. Cada gesto sumó una capa nueva de sentido, convirtiendo el conjunto en una superficie común, en permanente construcción. Rodríguez Vigo propuso un recorrido sin jerarquías: una obra que no se exhibe, sino que sucede, que se expande en el encuentro.
La experiencia se acompañó con la música en vivo del bajista Cristian Leguizamón, cuyas improvisaciones generaron una atmósfera envolvente y sensorial, entre lo meditativo y lo celebratorio. Su sonido acompañó el ritmo de las intervenciones y el pulso del público, marcando un contrapunto armónico entre lo visual y lo sonoro.
La velada contó con el acompañamiento de Blue Moon, que invitó a compartir una cerveza durante la actividad, reforzando el espíritu de encuentro y conversación que define a Cassia House. La galería, iluminada y abierta a la calle, se convirtió, una vez más, en escenario y punto de reunión, en ese territorio donde el arte se despliega no como objeto, sino como experiencia viva.
