Diana Ficca, María Andrea Anzorena
Curadora: Sofía Adissi
1 - 14 de Noviembre, 2025
Apertura: sábado 1 de Noviembre, 19hs
Cassia House presenta El volumen del silencio, una exposición que reúne pinturas de la artista italiana Diana Ficca y obras de la escultora argentina María Andrea Anzorena, bajo la curaduría de Sofía Adissi.
La muestra propone un diálogo poético entre vacío y plenitud, entre lo visible y lo latente. Lejos de concebirlos como opuestos, la curadora los aborda como fuerzas interdependientes: el vacío como condición de la forma, la plenitud como resonancia del espacio que la contiene.
En las obras de Ficca, la luz se convierte en una materia suspendida, donde cada tono parece sostener su propio silencio. Las esculturas de Anzorena, por su parte, trazan una presencia que respira: cuerpos que se abren, superficies que laten, espacios que se vuelven lenguaje.
Hay un instante anterior a todo, donde nada pesa aún, pero todo está a punto de suceder. Ese umbral no es ausencia, es tensión -un espesor en el aire- que sostiene la posibilidad, todo lo que pudo, puede y podrá ser. Allí, en ese instante habita el verdadero inicio de todo.
El volumen del silencio es ese espacio denso, inminente que anuncia como un signo, una huella aquello que está por venir.
El silencio no es pasivo, sino campo de tensión entre lo que quiere ser y lo que todavía se niega. Es latencia que calla ensordecedoramente y grita en susurros. Su volumen no se mide en metros ni en acústica, sino en la presión invisible que ejerce sobre la forma que está por suceder, una vibración sin sonido que talla el espacio desde adentro. Es en el silencio donde la materia reconoce su propia fragilidad, una presencia que ocurre al borde de desaparecer. En la danza entre vacío y plenitud la forma deja de ser objeto para convertirse en acontecimiento.
Vacío y plenitud no son polos opuestos sino un mismo pulso: dos caras de una moneda que giran sin detenerse. Hay un ritmo entre ambos, una respiración que alterna presencia y retiro.
La forma no nace contra el vacío, sino desde el; no desde la voluntad de ocupar, sino desde la capacidad de oír lo que aún no pesa. Lo esculpe sin agotarlo. No lo anula, lo revela. Porque el límite de un cuerpo no es su borde, sino el aire que lo sostiene.
- Sofia Adissi
El volumen del silencio propone una experiencia de contemplación y de escucha. Un recorrido donde el aire, la forma y la distancia adquieren densidad, y donde lo que no se dice se vuelve parte esencial de lo que acontece.
